Ei-iE

Resolución sobre racismo y intolerancia religiosa

publicado 22 julio 1995 actualizado 31 marzo 2017

El Primer Congreso Mundial de la Internacional de la Educación, reunido en Harare (Zimbabwe) del 19 al 23 de julio de 1995:

1. Nota el aumento de la intolerancia racial, étnica y religiosa en muchas regiones del mundo;

2. Expresa su preocupación ante el rápido crecimiento del número de personas refugiadas, desplazadas y en busca de asilo a consecuencia de dicha intolerancia;

3. Proclama su horror ante la discriminación brutal y los ataques asesinos contra minorías nacionales, los intentos genocidas de depuración étnica y las guerras étnicas;

4. Condena la violencia indiscriminada basada en la intolerancia racial, étnica y religiosa;

5. Expresa su preocupación por el éxito electoral de partidos de extrema derecha con tendencias racistas y antisemitas;

6. Deplora el aumento de los grupos religiosos fundamentalistas que se muestran intolerantes frente a cualquier otro grupo que no comparte sus creencias;

7. Deplora igualmente la respuesta de los estados miembros de las Naciones Unidas para otorgar a la ONU la capacidad de intervenir efectivamente como fuerza de paz que proteja a las víctimas de los ataques generalizados;

8. Condena a los países que adoptan políticas basadas en la intolerancia y que niegan el derecho a asilo a los perseguidos a causa de la intolerancia racial, religiosa o étnica.

El Congreso:

9. Felicita al pueblo de Sudáfrica por su éxito en poner término al apartheid;

10. Reconoce la responsabilidad especial que tiene la profesión docente y todos los trabajadores de la educación en la enseñanza y la práctica del respeto y la tolerancia por las diferencias culturales, étnicas y religiosas de los niños y los jóvenes con los que trabajan; 11. Subraya que la lucha contra todas las discriminaciones e intolerancias forma parte integrante del aprendizaje de la ciudadanía, función fundamental de la educación.

El Congreso hace un llamamiento a las organizaciones miembro para que:

12. Aumenten sus esfuerzos por combatir todas las formas de racismo, antisemitismo, fundamentalismo intolerante, nacionalismo chauvinista y xenofobia; y se aseguren de que esta lucha sea parte integral de la educación que se otorga a todos los estudiantes;

13. Hagan presión ante los gobiernos y otras autoridades para que proporcionen los recursos necesarios para emprender esta labor;

14. Promuevan la creación de condiciones dentro de las escuelas que permitan una integración exitosa de los niños de las minorías étnicas y los niños de los trabajadores migrantes;

15. Proporcionen programas especiales a los niños de las minorías étnicas para asegurarse de que no sean discriminados a causa del idioma;

16. Fomenten el derecho de los niños de las minorías étnicas a aprender y emplear su lengua materna.

El Congreso de la Internacional de la Educación además recomienda a las organizaciones miembro de la IE cooperar con otras organizaciones no gubernamentales, organizaciones civiles y organizaciones políticas para:

17. Promover y apoyar las políticas de vivienda dirigidas a terminar con la formación de ghettos de minorías étnicas y trabajadores migrantes con su acuerdo libre y no impuesto;

18. Apoyar la lucha por los plenos derechos civiles, políticos y sociales de los trabajadores migrantes y las minorías étnicas; 19. Ejercer presión para la ratificación y aplicación de las declaraciones, convenios y recomendaciones internacionales, en particular:

a. La Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas;

b. El Pacto Internacional para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial;

c. El Convenio 148 y la Recomendación 151 de la OIT concernientes a los trabajadores migrantes y sus familias;

d. El Convenio 111 de la OIT sobre la discriminación con respecto al empleo y la ocupación;

e. El Convenio 107 de la OIT sobre los pueblos indígenas y tribales en los países independientes;

f. La Declaración de Helsinki;

g. El Convenio sobre los Derechos del Niño;

20. Defender el derecho legal al asilo político en su país;

21. Condenar los actos de racismo, antisemitismo, intolerancia religiosa y xenofobia dentro de su país o en el plano internacional;

22. Ejercer presión ante los gobiernos para asegurar que se mantengan los derechos de aquellos que buscan asilo a consecuencia del racismo, antisemitismo, intolerancia religiosa o violencia étnica.