Ei-iE

Students attend class at Nangarhar University in Jalalabad, Afghanistan (Credit: University Media Center via AP)
Students attend class at Nangarhar University in Jalalabad, Afghanistan (Credit: University Media Center via AP)

Afganistán: El régimen talibán tiene que poner fin a sus ataques contra la profesión docente

publicado 1 junio 2022 actualizado 3 junio 2022

La Internacional de la Educación condena las medidas abusivas impuestas por el gobierno talibán en las universidades e instituciones de enseñanza superior en Afganistán. Dichas medidas constituyen una clara violación de los principios de libertad académica y autonomía institucional recogidos en la Recomendación de la UNESCO relativa a la Condición del Personal Docente de la Enseñanza Superior (1997).

En lo que a todas luces parece un intento de purgar el sistema educativo del país de todo tipo de expresión independiente, se ha requerido hace poco a las universidades afganas que denuncien al profesorado “corrupto, incompetente y destructivo” que haya en sus filas. La carta de las autoridades ordena asimismo a las instituciones de enseñanza superior que notifiquen sobre cualquier docente que hubiera tenido vínculos con gobiernos anteriores.

La Internacional de la Educación reafirma la importancia crítica de la libertad académica para fomentar el pensamiento y la expresión independientes, fortalecer la democracia y contribuir al bien común de las sociedades. La Resolución de la Internacional de la Educación sobre la libertad académica en la enseñanza superior de 2019 establece que “el personal docente de la enseñanza superior y de la investigación debería disfrutar […], sin interferencias, de los derechos civiles, políticos, sociales y culturales internacionalmente reconocidos y aplicables a todos los ciudadanos y las ciudadanas”.

La Internacional de la Educación insta a las autoridades afganas a que respeten los derechos y libertades de los y las profesionales de la educación, en particular la libertad académica.

En una resolución adoptada el pasado mes de diciembre, el Consejo Ejecutivo de la Internacional de la Educación expresó serias preocupaciones respecto a la catastrófica situación de la democracia y la educación en Afganistán desde que los talibanes tomaron el poder en agosto de 2021, y, en particular, respecto a la seguridad de los educadores y las educadoras y a la igualdad de acceso de las niñas a la educación. Este nuevo ataque a la educación y a la libertad académica corrobora una vez más que, a pesar de sus promesas iniciales, al final el actual régimen no se diferencia del gobierno talibán de los años 90.

La Internacional de la Educación se solidariza plenamente con sus organizaciones miembros y con la comunidad docente de Afganistán.